lunes, 27 de julio de 2009

Nuevo espacio

No puedo recordar cuándo ocurrió (pero sí afirmo que fue muy temprano en mi adolescencia) que empecé a buscar un espacio donde pudieran cristalizarse ciertas funciones de mi mente que yo nunca alcancé a comprender del todo.
Cree este espacio para ir anexando pensamientos, historias y vivencias.
Escribo y escribo ... Cosas sin sentido a veces... Pensamientos absurdos otras; vivencias, sueños imposibles, realidades que me golpean sin piedad en pleno rostro... Lo que me pasa; lo que me gustaría que me pasara, lo que ya viví... Incluso lo que aún me queda por vivir...
Escribir tiene algo de mágico y de misterioso. Como transmitía a unas amigas, es como una necesidad del alma que cuando surge no hay forma humana de detenerla. Y entonces tomo lo primero que tengo a mano. Cualquier minúsculo trocito de papel puede servir, en un momento dado, para dejar plasmados esos pensamientos que me asaltan.
Escribir, de alguna manera, es también el equivalente a reir o a llorar. Cuando la tristeza del alma resulta tan aplastante que casi te puede, en vez de llorar, dejando que las lágrimas fluyan lentamente, arrastrando con ellas toda la angustia que oprime y asfixia hasta casi no dejar respirar, escribo...
Y voy dejando, en lo que era una hoja en blanco, toda una montaña de sentimientos que si no fuera así seguramente jamás saldrían fuera. Después llega la liberación, aunque sólo sea momentánea, y la angustia desaparece.
Otras veces escribo, las cosas buenas que te me van pasando. Y con el tiempo, cuando vuelvo a releerlas, es como vivirlas un poco de nuevo...
Ya sean alegrías o tristezas, escribir por escribir puede llegar a convertirse en la mejor terapia...
Pues siii esta es mi terapia, que bien o mal me libera de las tristezas o trae de vuelta las alegrías cuando leo esos momentos de felicidad!

1 comentario:

  1. Hola Sandra, ¿cómo estás? Recién leí tu comentario en mi blog. No sabía si responderte acá, o en mi blog. Con respecto a la dieta si te querés enganchar con ella hay muchos testimonios de gente que adelgazó muchusímo, realmente son inspiradores. Uno de las cuestiones que hizo un click en mi cabeza para seguir fue: ¿si los demás pueden... porqué yo no? Ojalá que te enganches vos también con ella. Igual lo importante es comer sano, y en medida. Un beso,
    Mari

    ResponderEliminar