jueves, 25 de marzo de 2010

Necesito Vacaciones y mis neuronas también



Atención: no es un escrito como los que suelo escribir ya podrán darse cuenta que no estoy funcionando muy bien que digamos.

Crónica de mi pre- vacaciones

No logro entender si son mis casi 29 añitos por cumplir (9 de abril gente!!) o el aumento de la rutina de trabajo + la escuela de Vicky pero siento que este año no sé si llego… a mis anheladísimas vacaciones, ¿colapsaré antes????

Sumada a la tristeza interna que tengo me pasan cosas tan bizarras estos días previos a mis vacaciones que hasta me da cierta cosa rara contar:

Paso a enumerar sólo algunas de ellas:

• Siete cuarenta de la mañana: llego al auto y me doy cuenta que no me iré a ningún lugar sin las llaves grrrrrrr…. y más y más grrrrrrrr y bueno, a volver por las llaves. 1) subir 32 escaleras hasta el Dpto.; 2) ubicar las llaves de la puerta de casa dentro de mi cartera que contiene un millón de pertenencias las cuales no termino de entender para que las tengo ahí!!! Mientras Vicky extiende sus cuestionarios de mami, mami, ¿porque? ¿Porque? ¿Porque? Típico de sus cuatro añitos.
• Envío mensajes de texto vacíos!!!! Le doy OK a enviar sin escribir!!!!!!!!!!!!!!!! (bandeja de salida: no hay nada para mostrar).
• Lo anterior ocurre si no cometo la necedad de darle a responder al mensaje… como los típicos mensajes míos más largos que mis mails….. y me pasa que chan chan chan… no envía porque me quedé sin crédito… y, esto me puede pasar sucesivamente en una o dos horas, ¿Qué si se complica mucho recordar que me quedé sin crédito??????? En mis condiciones creo que si.
• Mi pobre hija últimamente llega todos los días a la escuela sin merienda, tengo que dejarla y salir a comprarle algo…. cosa que antes no me ocurría, por ende sigo llegando siempre en horarios completamente distintos a los que me planteé llegar al trabajo.
• Reprogramo el despertador al menos 4 veces en menos de 10 minutos, lo que en conclusión no me da muchos beneficios de sentir que valió la pena quedarme más tiempo en la cama.
• No puedo coordinar una charla distendida en la cocina mientras esperamos el café o preparamos el mate por muy buen humor que haya en el ambiente con mis compañeros de la oficina.
• Miro constantemente el reloj de mi PC rogándole al señor tiempo que pase rápido pero que me dé el beneficio de hacer todo lo que me propuse en el día. ¡que ilusa!
• Si digo que salgo a una hora, me pasan diez mil cosas desde el momento en el que estoy pisando la puerta de salida hasta que llego a casa; conclusión: por esas diez mil razones llegue a casa dos horas mas tarde…. Y más y más gggggrrrrrrrrrr.
• Me considero una optimista de la vida, pero vaya que últimamente nada queda de esa mujer.
• Y no me atrevo a enumerar las cosas que me pasan dentro del ámbito laboral así que mejor lo dejo por ahí……………..

Parece que abril esta tan, tan, pero tan lejos, que nunca llegará. Encima me quedan solo 2(dos) neuronas funcionando, una trabajando para el sistema “músculo-esquelético” y otra manejando mis necesidades fisiológicas básicas.
En resumen, escribir me esta costando un montón y la falta de ideas se me nota.
Tal vez sea cierto y esté en una depresión pre-vacacional bastante grave.

martes, 23 de marzo de 2010

Dejarte ir


Se que dejarte ir me da un dolor inmenso, se que no ibas a tomar la decisión así que tuve que arremangarme la tristeza y dar un cierre a la corta historia que tuvimos.
El dolor es grande, y a lo mejor no es por lo que dejamos atrás sino más bien por la ilusión que tenía de lo que seríamos juntos.
Entendí que no era tu momento, y sé que quizás nunca será.
Solo anhelo que la valentía que tuve esa noche me traiga la recompensa de un amor que esté a mi alcance.
Yo me sentía lista… pero vos no y...Hoy…hoy no me sirve que me hayas dicho todo lo lindo que he sido en tu vida, porque de todas formas me dejaste ir…aceptaste todas mis palabras de que no te veía listo, preparado para darme lo que yo te estaba ofreciendo.
La frase “me hubiese encantado encontrarte en otro momento de mi vida” me duele, es una realidad que no fue y no será jamás.
Debo cerrar esta puerta para poder encontrar otra que me dé la felicidad que anhelo hace tanto tiempo.
Una vez más me equivoqué pero no debo bajar los brazos hay mil razones para seguir sonriendo…y como la rosa en el cuento del principito no dejaré que me veas llorar usaré mis lágrimas para enternecerme por dentro, preparándome para lo que venga.
Sólo por hoy bajaré la guardia y lloraré, limpiaré mi alma de tanto dolor.
Mañana… mañana quizás haya dejado todo atrás.

lunes, 22 de marzo de 2010

La esencia


Nota: Quiero pedir perdón por este post, seguramente este no es el lugar para él, y puede que me equivoque a la hora de exponerlo de esta forma.

En principio pensé que no me saldrían las palabras, soy consciente de que dejo muchas cosas en el tintero y que a penas se me va a entender, solo espero que si la persona a la que va dedicada pasa por este rinconcito , pueda entender al menos su esencia. "Perdón por abusar así de algo que no me pertenece, si tengo que sacarlo haceme saber.





No es necesario colgarse del techo de la luna para ver el firmamento, al igual que no es necesario caerse para saber que duele.

De nada sirve llegar a la luna con una flecha sino se tiene a quien contar la hazaña, de nada sirve llegar a lo más alto si descuidamos lo más cercano. Podes lanzar una flecha a cada muro de la luna y subir ahí para colgarte de su techo, podes saltar por encima de tontos, sabios y necios, pero algún día tendrás que volver a bajar y enfrentarte al mundo.

De nada sirve tener un jardín si todas sus flores son grises, de nada sirve tener un volcán si no gastas el tiempo en limpiarlo al igual que de nada sirve aspirar una esencia si no te paras a descubrir porque es especial. Cada rosa es única y cada esencia aspirada especial, no creo que no lo veas, no creo que seas incapaz de ver la belleza de tus flores grises o la utilidad de un volcán.

Puede que tu jardín esté descuidado, tus pasos en él sean informes, puede que tus volcanes echen humo negro porque hace mucho que no se limpian, puede que todas tus flores parezcan iguales, pero ¿sabes? es difícil creer en algo sino te paras a aspirar su esencia.

Jamás la esencia será perenne, no siempre que se guarde junto al corazón, quizás lo importante no sea ganar el partido sino divertirse jugando.

La esencia dura mucho más que nosotros, es eterna siempre que la sepamos conservar o queramos conservarla. Es muy fácil culpar al destino, a lo que llevas en tu corazón o a la propia esencia en si. Lo difícil es limpiar tu jardín sabiendo que podrás no conseguirlo, podar tus rosas con el riesgo de que se puedan secar o deshollinar tus volcanes sabiendo que pueden no volver a entrar en erupción. De nada sirve tener un mundo a nuestros pies si somos incapaces de inhalar su esencia, porque queremos que sea perenne, o disfrutar lo que se nos dio, porque sentimos que no podemos mirar más allá de nuestras propias restricciones.

De todas formas todo da igual, llega un punto donde ni lo vivido importa y lo que está viviendo no merece la pena, un punto de no retorno, donde volver al principio es imposible y andar hacia delante se nos antoja muy difícil, llegados ahí solo quedan dos opciones, dejar de andar y ver como el jardín, las rosas y los volcanes se van consumiendo mientras vivimos de recuerdos o seguir avanzando, dejar el pasado atrás y solo recordar los buenos ratos, tratar de construir un nuevo jardín y descubrir como lo hizo el Principito, que su rosa, su jardín y su volcán siempre fueron su casa y que su rosa, su jardín y su volcán lo necesitaban tanto como él a ellos.

Por último escribir algo más, probablemente lo más importante de todo lo expuesto por mis emociones: de nada sirve tener todo un mundo sino se puede compartirlo, si no nos proponemos en mantenerlo, de nada sirve ser rey sino se tiene a quien gobernar.


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Para lograr una conexión con lo escrito dejo un pequeñito párrafo del libro “El principito” cuyas letras me han llegado hondamente.

….Sí, yo te quiero -le dijo la flor-, ha sido culpa mía que tú no lo sepas; pero eso no tiene importancia. Y tú has sido tan tonto como yo. Trata de ser feliz. . . Y suelta de una vez ese fanal; ya no lo quiero.

-Pero el viento...

-No estoy tan resfriada como para... El aire fresco de la noche me hará bien. Soy una flor.

-Y los animales...

-Será necesario que soporte dos o tres orugas, si quiero conocer las mariposas; creo que son muy hermosas. Si no ¿quién vendrá a visitarme? Tú estarás muy lejos. En cuanto a las fieras, no las temo: yo tengo mis garras.

Y le mostraba ingenuamente sus cuatro espinas. Luego añadió:

-Y no prolongues más tu despedida. Puesto que has decidido partir, vete de una vez.

La flor no quería que la viese llorar: era tan orgullosa...