
Hoy me nació recordar a alguien especial, quién no está más en mi vida y cuyo sentimiento es de un gracias totales!
Hay personas que pasan por la vida de uno, no para quedarse sino para curarnos e irse.
Son personas que llegaron de una manera diferente, y así como llegaron, un día se fueron y casi que no nos dimos cuenta.
Son personas muy especiales, que no todo el mundo tiene la suerte de conocer o, llegado el caso, reconocer.
Personas que regalan sonrisas, que escuchan, aconsejan y acompañan, desde un lugar diferente.
Personas que de alguna manera, en otro momento de nuestras vidas, ni siquiera hubieran sido alguien. Y, en cambio, pudo llegar a ocupar un espacio gigante.
Personas que hasta suelen darse cuenta cuándo deben irse, y no volver. Y ese es otro de sus regalos.
Personas que nos dan algo que nadie más pudo hacerlo (al menos en ese momento): un abrazo; un llamado; una palabra dicha en el instante exacto en que era necesaria.
Personas que nos hicieron sentir especiales. Personas que hicieron volver a creer en que las cosas buenas pueden pasar.
¿Que recuerdo llevo de él?; su tiempo conmigo y su manera de irse en silencio.
Por ello lo tomo como lo que fue en mi vida: alguien especial que estaba de paso para regalarme lo mejor en ese momento.
¿A quién no le ha tocado encontrarse en el camino con estos seres?
¿Si reflexionáramos un poco...hemos estado de paso en la vida de alguien?