viernes, 27 de agosto de 2010

Hasta que me pueda el corazon

Un día dejé de escribir. Hubo un artículo de cierre de un blog que tenía, ni siquiera apuntaba esos pensamientos que se me vienen a la cabeza de vez en cuando
Decía que un día dejé de escribir. Y la verdad me duró bastante tiempo. No he mirado los archivos, pero desde aquél "Final" hasta el siguiente artículo pasaría seguro más de un año tal vez. Quizá casi dos. Dejé de hacerlo porque este, como dice un genio, es mi idioma. Y cuando el idioma no se entiende, es mejor dejar de hablar con él.
Dejé de hablar, volví a cerrar con llave mis sentimientos, todos. Si las cosas que decía no se entendían, no tenía sentido que siguiera dejándolos libres. Más tarde me pudo el corazón y empecé otra vez a sacarme los hilos del alma poco a poco.
Ahora todo se entiende, perfectamente. Quizá ni yo misma sabía muy bien qué significaban todas esas cosas que plasmaba en una pantalla. Digamos que he actualizado el vocabulario y ahora todo está bastante más claro. Pero a veces me gustaría dejar de escribir.
No hay ninguna similitud con aquél momento, las razones han cambiado. Me conozco mejor, sé quién soy, tengo clarísimo lo que siento. Han desaparecido los velos, las mantas, las palabras a media luz que enseñan la parte común y esconden lo que los ojos no quieren ver. Solamente a veces me siento algo imbécil por reprimir tantas cosas. Me siento cansada, y es que me han decepcionado tanto que al recordar ciertas cosas no me cabe el alma dentro. No soy capaz de que salga y penetre en el corazón ajeno cada vez que se pasan los ojos por las letras. No soy capaz de transmitir, de meterme dentro, no soy capaz de decirlo, no soy capaz de hacer ni entender nada.
Por eso a veces me gustaría dejar de escribir. No sé cuánto tiempo aguantaré, ni si reprimiré esos destellos improvisados de algunos escritos guardados en la carpeta Sandra personal-. Subcarpeta - escritos varios –En mi compu.
Intentaré mantenerme, pero tengo la impresión de que no será largo. Otra vez volverá a poderme el corazón.
Necesito cerrar una etapa dolorosa de mi vida y dar comienzo a una etapa nueva sobre todo en la vida de mi solcito, es un derecho que tiene por su identidad.
Que lástima que la justicia a veces se hace tan lenta.

5 comentarios:

  1. SAN, TENÉS LAS PUERTAS ABIERTAS DEL BLOG PARA CUANDO QUIERAS.
    EL TUYO ES LINDÍSIMO!

    UN BESO GRANDE, http://malatendida.blogspot.com :)

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  2. La pasamos bien: muchas gracias por visitar mi rinconcito, ya estoy siguiendo el tuyo y me parecio muy fresco,muy original. Un saludo grande

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  3. Mal atendida: gracias por pasarte, y nuevamente felicitaciones! te sigo en tu blog porque me encanto la manera que contás lo que te pasa.
    Cariños,
    San

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  4. Ser diferente para hacer cosas diferentes
    Es una excelente frase

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